Las transferencias monetarias no contributivas

12 de febrero de 2021

Edición: Feb 2021

La protección social juega un papel fundamental en la realización de los derechos de las personas con discapacidad a lo largo del ciclo de vida, y en particular en la etapa infantil. Si bien la población infantil con discapacidad es heterogénea, no solo debido al tipo y grado de discapacidad que experimenta, sino también a su condición socioeconómica, género, etnia y lugar de residencia, entre otros factores, un lamentable denominador en común es que enfrenta el riesgo de graves vulneraciones de sus derechos y exclusión cotidiana.

Ante este escenario, los diversos instrumentos de protección social pueden servir como herramientas para promover el desarrollo y ampliar la inclusión de los niños y niñas con discapacidad al asegurar niveles de vida básicos, proveer apoyos monetarios para dispositivos de asistencia (por ejemplo, sillas de ruedas, prótesis y audífonos) y ampliar el acceso a servicios básicos de salud, rehabilitación, estimulación y educación, entre otros.